Los hospitales de Coslada y de Sant Cugat han puesto en marcha un Plan de Humanización de la asistencia sanitaria, un proyecto transversal enfocado a trabajar el bienestar de pacientes, familiares y profesionales. La estrategia busca avanzar hacia el concepto de hospital líquido.

Los avances tecnológicos y el conocimiento de nuestros profesionales son esenciales para ofrecer un diagnóstico y tratamientos de calidad, pero la asistencia sanitaria no se puede concebir sin tener en cuenta también el aspecto humano. Elementos como la comunicación entre médico y paciente, la participación de los familiares, el cuidado de los profesionales y el diseño de infraestructuras a medida de las personas son componentes que pueden incrementar de forma muy importante el bienestar de los usuarios de la Mutua.

Bajo esa perspectiva, Asepeyo hemos impulsado el Plan de Humanización de la asistencia sanitaria en nuestros hospitales. En esta iniciativa prima la implicación de usuarios, familiares y profesionales. Se pone en práctica una medicina donde las personas participan de manera activa en su proceso de curación y se incentiva la comunicación y el acceso a información, fomentando el respeto y la empatía.

HOSPITAL DE COSLADA

El programa se presentó por primera vez en Coslada en noviembre del año pasado. Este centro cuenta con diferentes actuaciones enmarcadas en el proceso de humanización de la asistencia. Entre ellas, se encuentran el proyecto Hospital sin Dolor, el plan de seguridad del paciente, la dinamización de las ayudas sociales y detección de necesidades, la certificación EFQM 500+ en excelencia de la prestación y la Escuela del Cuidador.

“El reto final es tratar a los pacientes como personas singulares y únicas que requieren respuestas personalizadas a sus necesidades y expectativas”, explica Isabel García Gismera, gerente del hospital de Coslada, “nuestro objetivo es avanzar en el concepto de hospital líquido, un hospital  que va más allá de nuestras paredes con la implicación de pacientes, familiares, profesionales y sociedad en general”.

Por su parte, Concepción López López, directora de enfermería del hospital de Coslada afirma que “la humanización hospitalaria se construye día a día. Realizamos todas las actividades sanitarias desde el convencimiento de que cada persona es única. Es fundamental reconocer el verdadero protagonismo de cada individuo en el proceso asistencial.

Por otro lado, en el hospital de Coslada existe el grupo de integración hospitalaria Cuidar con el corazón, que trabaja en dos áreas dirigidas fundamentalmente a:

  • Mejorar el bienestar del paciente y la familia,
  • Cuidar del estado anímico y motivar las relaciones entre los profesionales.”

 

HOSPITAL DE SANT CUGAT

En febrero se presentó también en Barcelona la puesta en marcha del programa integral de humanización, que sigue los mismos principios: hacer de los hospitales un espacio más amable para pacientes, familiares y trabajadores. Tal y como explica M. Àngels Pi, directora de enfermería del hospital de Sant Cugat, “la humanización es un proceso de actitudes que requiere saber comunicar, tener habilidades de relación, saber escuchar y empatizar con pacientes, familiares y trabajadores”.

Una de las líneas de trabajo es el proyecto Humanizando UCI, que consiste en impulsar acciones para que los pacientes se sientan más confortables, el acompañamiento activo a la familia y formación y cuidado a los profesionales. El plan incluye también la organización de otro tipo de actividades culturales y musicales, abriendo las puertas del hospital a la sociedad para fomentar un entorno más amable y acogedor.