El resfriado común es una de las enfermedades más extendidas, una patología leve que habitualmente no requiere de atención médica. Aún así, la tos, el dolor de cabeza y la abundancia de mucosidad pueden ser muy molestos, y aunque en muchos casos tampoco es necesario tomar fármacos, existen algunas claves para aliviar sus síntomas.
Llega la estación del frío, y con ella, la tos, los estornudos y el dolor de garganta. Es el resfriado común, una patología infecciosa causada por una gran diversidad de virus, que año tras año afecta a muchas personas. De hecho, es habitual que los adultos la suframos hasta tres o cuatro veces a lo largo del año. Los síntomas más comunes suelen ser irritación de garganta, dolor de cabeza, nariz tapada, estornudos abundantes y ojos llorosos. Al contrario que la gripe, no es habitual la fiebre más allá de unas pocas décimas en adultos, aunque entre niños y jóvenes sí pueden darse temperaturas un poco más altas. El resfriado no suele provocar dolores musculares y los síntomas desaparecen al cabo de entre siete y diez días.
¿POR QUÉ NOS RESFRIAMOS MÁS EN INVIERNO?
El invierno es la estación del año en que es más habitual tener un resfriado común debido a varias razones. Por un lado, el frío y la humedad facilitan la supervivencia de este tipo de virus, y por otro, con la bajada de temperaturas, la respuesta inmunitaria de nuestro organismo es más lenta y menos eficaz. Además, en estas épocas pasamos más tiempo en lugares cerrados, por lo que las posibilidades de entrar en contacto con el virus aumentan. Aún así, los virus del resfriado están presentes durante todo el año y por eso es posible contraer la enfermedad en épocas menos propicias, como primavera y verano.
CÓMO EVITAR LOS RESFRIADOS
La transmisión del virus se realiza a través de la saliva o la mucosa expelidas por el portador al toser o estornudar, y el contagio se da habitualmente a través del aire y las manos, ya sea por contacto directo o al tocar superficies que estén contaminadas con el virus. Es por ello que una de las medidas más eficaces consiste en mantener un buen nivel de higiene: lavarse las manos a menudo si se convive con una persona resfriada, ventilar la habitación y limpiar las superficies de contacto común.
NO SE DEBEN TOMAR ANTIBIÓTICOS PORQUE NO TIENEN NINGÚN EFECTO SOBRE LOS VIRUS DEL RESFRIADO
En cuanto al enfermo, además de lavarse las manos con frecuencia, debe utilizar pañuelos de un solo uso y cubrirse la nariz con ellos al estornudar para evitar contagiar a los demás. Hay que tener en cuenta que el virus se contagia con mayor facilidad durante los dos o tres primeros días, y que no todas las personas tienen las mismas posibilidades de enfermar, puesto que suelen resfriarse quienes cuentan con un sistema inmunitario debilitado que no permite al organismo eliminar el virus.
HIDRATACIÓN, EL MEJOR TRATAMIENTO
El resfriado común no requiere de atención médica, a menos que existan dificultades respiratorias o los síntomas no disminuyan al cabo de diez días. En cuanto a tratamientos farmacológicos, se pueden tomar analgésicos como el paracetamol o el ibuprofeno para reducir el dolor de cabeza. En el mercado existen también numerosos medicamentos específicos para el resfriado dirigidos a aliviar los síntomas, aunque su eficacia es relativa y no conseguirán que el resfriado desaparezca más rápido. En cualquier caso, no se deben tomar antibióticos, ya que no tienen ninguna acción frente a los virus.
LOS ADULTOS PUEDEN CONTRAER ENTRE 3 Y 4 RESFRIADOS AL AÑO
Una de las medidas más efectivas contra el resfriado es también la más barata y sencilla: beber abundante agua. Es una forma de diluir la mucosidad que se ha demostrado más eficaz que el uso de mucolíticos. Además, es aconsejable ingerir bebidas calientes como caldo e infusiones, puesto que además de hidratar, ayudan a atenuar la irritación de garganta, siempre que sea a temperatura no muy elevada.
Las medidas para tratar el resfriado y aliviar el malestar incluyen también la limpieza de las fosas nasales con suero fisiológico. Este se puede comprar en farmacia o preparar de manera sencilla en casa: se añaden 5cc de sal a 500cc de agua, se calienta sin que llegue a hervir y se deja enfriar a temperatura ambiente. Para aplicarlo en las fosas nasales, puede utilizarse una jeringa con presión leve.
De cara a mejorar la obstrucción nasal, es aconsejable realizar inhalaciones con agua caliente, añadiendo de forma opcional eucalipto o mentol. Las duchas o baños calientes, además de resultar relajantes, contribuyen también a fluidificar las secreciones de mucosidad. Por último, es recomendable evitar toser si no es para expeler mucosidad, puesto que contribuye a irritar la garganta.
Aprovecha para revisar tus hábitos de estilo de vida, principalmente tu alimentación. Una alimentación variada y equilibrada, siguiendo los principios de la dieta mediterránea, así como el descanso reparador y la práctica regular de actividad física te mantienen saludable.

CONSEJOS FRENTE AL RESFRIADO
- Bebe líquido abundante.
- Duerme con la cabeza elevada.
- Haz lavados nasales con agua tibia y sal.
- No fumes.
- No tomes antibióticos.
CÓMO MINIMIZAR RIESGOS
- Utiliza pañuelos de papel de un solo uso.
- Lávate las manos a menudo.
- Ventila la habitación.
- Evita el aire acondicionado en exceso.
- Limpia las zonas comunes contaminadas.
- Fortalece tu sistema inmunológico.