Vamos con más protagonistas de la Trailwalker. Los integrantes del equipo 2 ya se están preparando, están entrenando a tope porque quieren darlo todo los próximos 6 y 7 de abril. Te contamos un poco cómo son y qué les ha movido a apuntarse a este reto.

Sergio Moliner
Dirección de Prevención. Marchador
Colaborador, romántico y activo
El reto deportivo no fue lo que me motivo de verdad. Aprender del espíritu de superación de las personas, eso es lo importante.

Telmo Lasa
Centro asistencial Donostia-San Sebastián. Marchador
Deportista, alegre y buen compañero
Me encantan los retos, pero nunca he participado en distancias más largas que la maratón. Además, viendo los vídeos y las entrevistas a los participantes de años anteriores, no podía perderme vivir la experiencia. Y lo más importante, me apetece mucho conocer a compañeros fuera del ámbito laboral.

Paco Cabello
Paciente. Marchador
Positivo, luchador y despistado
Estoy encantado de ir a la Trailwalker porque la naturaleza me apasiona. También me gusta mucho conocer gente interesante y positiva. Además, los retos deportivos siempre me resultan atractivos.

José Sánchez
Paciente. Marchador
Humilde, tenaz y optimista
Aunque repito este año, la Trailwalker sigue siendo un reto para mí. La primera vez fui muy al límite de mis fuerzas, tanto física como mentalmente.

Lluis Guirao
Hospital Asepeyo Sant Cugat. Equipo de apoyo
Trabajador, perseverante e inquieto
La Trailwalker es un desafío para mí, ¡y los desafíos me encantan! Quiero ayudar a nuestros equipos a conseguir sus objetivos, que comparto y admiro. Creo que esta marcha solidaria es un evento muy bonito, en el que todo el mundo debería participar en algún momento de su vida.

Marta Arnau
Dirección de Comunicación. Equipo de apoyo
Alegre, comprometida y un poco alocada
Tengo muchas ganas de vivir esta experiencia, tanto personal como profesionalmente, por todo lo que significa y por la gran labor que se hace. Llevo las redes sociales de Asepeyo y he vivido las pasadas ediciones de la Trailwalker desde mi casa, publicando las imágenes y comentarios que me iban pasando los participantes. Cada año pensaba lo mismo: yo debería estar allí y vivirlo en primera persona, y… ¡el 2019 ha sido el año!